Martínez incluye en este libro, tanto en las ilustraciones de los capítulos te- máticos como en los proyectos presentados, son edificios concebidos para ser confrontados y experimentados en vivo y en directo. Esta elección se opone a la arquitectura de imágenes ópticas sorprendentes y elaboraciones formales perturbadoras, que deliberadamente buscan violar las leyes fundamentales de la física, la percepción y la psicología. Los edificios presentados en este libro son ejemplos de la arquitectura del realismo sensorial».

La arquitectura de los sentidos está pensada y creada para sentir. Potencia el despertar de sensaciones. Es acogedora. Es una arquitectura sensibilizada por el entorno y las personas. Transmite sensaciones, emociones que hacen sen- tir bienestar, creando espacios multisensoriales. Es una arquitectura pensada para la vida, una arquitectura humanizada que provoca interacciones, es decir empatía sensorial entre las personas y el entorno, que nos permite disfrutar de la polifonía de los sentidos y nos invita a la intimidad sensorial, pues transmi- te sensaciones de domesticidad y confort que estimulan y fortalecen nuestras facultades más sutiles y humanas. Esta arquitectura sensualiza y poetiza el entorno transmitiendo bienestar, serenidad y energía.

A lo largo del libro se plantea la segunda vida de la obra de arquitectura cuya emoción nace en el autor y renace en el espectador. Se exponen los diez sis- temas sensoriales en los que se incluyen el del bienestar físico, orientación, posición, movimiento corporal y el sentido háptico y se describe la capacidad de los materiales para convertirse en fuente de placer. También se explica la percepción fenomenológica, incluyendo el valor de las experiencias cotidianas como fuente para la creatividad. Se plantea una arquitectura atenuada de ima- gen y estructura frágil a diferencia de la arquitectura de impacto visual. Final- mente se ofrecen pautas para la creación de una arquitectura de los sentidos y se explica cual es la esencia de la arquitectura y su poder poético.

La arquitectura de los sentidos se diferencia de la tradición formalista y se basa en la otra tradición, la tradición sensible, que iniciaron arquitectos como F.Ll. Wright, Hugo Häring, Gunnar Asplund, Sigurd Lewerentz, Erich Mendel- sohn, R.M. Schindler, Hans Scharoun, Alvar Aalto, Louis Kahn, Luis Barragán, Carlo Scarpa, José Antonio Coderch y Aldo van Eyck entre otros, que han crea- do una nueva práctica arquitectónica que continua en la actualidad.